Aunque el invierno no ha comenzado y aún nos queda algo más de un mes para convivir con el otoño, el termómetro inicia una bajada progresiva y el cambio de temperaturas ya se comienza a notar en nuestros hogares y en una factura de la luz que dadas las circunstancias, nos aumenta cada vez más. Nos encontramos en un momento en el que recurrir a la calefacción es un hecho que puede esperar, con el fin de ahorrar energía y gastos; por lo que las alfombras pueden jugar un papel muy importante a la hora de optar por aislantes térmicos y ahorrar en tu factura de la luz.
Las alfombras de lana y las de yute son un excelente aislante térmico natural, gracias a la composición de sus fibras.
Alfombras, proporcionando calor desde tiempos ancestrales
Sólo hay que echar un vistazo a la definición de la palabra Alfombra, en el diccionario de la lengua española, para confirmar su utilidad como aislante térmico:
El DRAE define alfombra como «Tejido de lana o de otras materias, y de varios dibujos y colores, con que se cubre el piso de las habitaciones y escaleras para abrigo y adorno».
Y así es, el origen de la alfombra no fue otro que el de calentar los suelos en las épocas más frías. Ya los primero hombres utilizaban las pieles de los animales que cazaban como aislante del exterior para mantener el calor del hogar. Más tarde, con la aparición de la ganadería y la agricultura, estos tejidos evolucionaron, realizándose tejidos de hebras de pelo animal y fibras vegetales.
La lana anudada se coloca como el mejor aislante térmico, ya que se trata de un material que ayuda al propio animal a mantener su temperatura corporal. Tanto es así, que actualmente se han creado materiales sintéticos con el fin de imitar la propiedad de la fibra animal.
Beneficios de las alfombras en invierno
Antes de contarte los beneficios que podemos tener con la colocación de alfombras en nuestro hogar, nos gustaría recalcar otro dato muy importante. La densidad y el tipo de fibra de nuestras alfombras son claves para obtener un resultado óptimo, ya que a mayor densidad, mayor aislante térmico nos proporcionará.
- Ahorra en tu factura de luz colocando alfombras: el frío se transmite a través de las ventanas y suelos, por ello la utilización de alfombras puede significar un ahorro de hasta un 30% en la factura de la calefacción.
- Las Alfombras, aliadas perfectas contra refriados: las alfombras retienen calor, convirtiéndose en objetos térmicos para elevar la temperatura del cuerpo, evitando así que nuestros pies entren en contacto directo con el frío suelo.
